Tras finalizar las labores de marcado del ganado nacido en el año 2012 y cuando estaban tentado una de las becerras los alumnos de la Escuela Taurina de Murcia llegó a la plaza Paco Dorado, apoderado del novillero Miguel Ángel Moreno, razón por la cual se optó por no dejar para la tarde los dos toros que tenía apartados y cambiar un poco el orden que estaba pensado en un principio.
Si no llega a ser porque el mundo del toro es muy serio diríamos que Miguel Ángel es tan buen anfitrión que sacó lo bueno para sus invitados y el se quedó con lo malo, ya que el primero de sus toros resultó muy complicado sin darle muchas opciones al lorquino y el segundo no pasó por los engaños ni una sola vez y eso que tanto Salvador Lobato como El Charra realizaron una gran labor de brega intentado por todos los medios conseguir que terminase embistiendo.
Otras ocasiones tendrá Miguel Ángel de estar como a él le hubiese gustado en la mañana del domingo.
De todos modos reproducimos unas cuantas instantáneas de lo ocurrido
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