Día 18 de Septiembre
MURCIA
Toros de Jandilla.- Bien presentados y de juego dispar
- RAFAELILLO.- Oreja y ovación con saludos
- FANDI.-Dos orejas y ovación con saludos
- CÉSAR JÍMENEZ.- Dos orejas y oreja
Rafael Rubio "Rafaelillos" ha tenido esta tarde que pechar con el peor lote (con diferencia) de la tarde. En primer lugar le ha correspondido un toro escaso de fuerza y al que le costaba trabajo entrar dos veces seguidas al engaño, y además sin ninguna claridad, pero el del Barrio del Carmen se ha mostrado muy firme con él y pudiéndole en todo momento. Ha cortado una meritoria oreja. Al cuarto de la tarde lo ha recibido a portagayola para administrarle de inmediato una larga cambiada rodillas en tierra, todo parecía que cambiaría su suerte, pero el toro se apagaba por instantes y se quedaba sin fuerzas y parado ante lo cual Rafael solo ha podido estar valiente y recetarle algún que otro de derechazo de calidad, al final ha fallado con el estoque y ha perdido la oreja que tenía merecida.
Fandi se ha encontrado con un gran toro en primer lugar, al cual ha podido banderillear con su natural soltura y realizar una faena "marca de la casa" dando derechazos en redondo encadenados, pases de pecho rodilla en tierra. Llegó con facilidad a un público entusiasta y fue premiado con las dos orejas tras una buena estocada. El quinto de la tarde fue todo lo contrario, un toro soso y sin fuerzas, ante el que no ha conseguido llegar a los tendidos con la fuerza suficiente para conseguir algún trofeo. Saludó una ovación del respetable.
César Jiménez se encontró hoy con el mejor lote de la tarde y no lo desaprovechó. Con el tercero de la tarde se vio a un César que soñaba lo que realizaba, naturales y derechazos gustándose, series totalmente verticales, pasándose los pitones a centímetros y con una estética sensacional, una manera muy bella y personal de entender el arte de Cúchares. Un estoconazo fue sufiente para pasaportar al toro con las orejas en las manos del torero. En el que cerraba plaza, que salio manseando, resultó un toro que servia, aunque algo escaso de fuerza, y el madrileño, a media altura le realizó una bonita faena, la cual tras matar de estocada tras pinchazo consiguió recoger al última oreja del festejo.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario