NUEVE OREJAS EN LA CORRIDA DE REJONES QUE CIERRA LA FERIA DEL 125 ANIVERSARIO

Día 16 septiembre
Murcia  Última de feria
3/4 aforo
Corrida de rejones
Toros de Fermín Bohorquez que sirvieron
- Pablo Hermoso de Mendoza.- Oreja y oreja
- Andy Cartagena.- Oreja y 2 orejas
- Diego Ventura.- 2 orejas y 2 orejas

    Pablo Hermoso abrió la tarde dando de salida una auténtica lección de lo que es torear con el caballo, sólo puso un rejón de castigo pero se lució de verdad pasándose al astado muy cerca de la cabalgadura y quebrando al toro para pasar entre las tablas y los pitones sin apenas espacio, se lució en banderillasy mató de un rejón y posterior descabello, paseando la primera oreja del festejo. En el segundo de su lote se movió más por los medios y puso unas banderillas cortas que enloquecieron al respetable, para terminar de un fulminante rejón con el que se aseguró la merecida puerta grande. 

     El primer toro que le correspondió a Andy Cartagena se paró muy pronto y él no termino de acoplarse en al principio en banderillas, dando demasiada distancia a la hora de ponerlas, pero el tema cambió cuando timó las cortas y se puso prácticamente encima de los pitones poniendo tres de estas con maestría, culmino con una estocada tras pinchazo y recogió la primera oreja de su cuenta. con el quinto de la tarde salió totalmente dispuesto a cortar ambas orejas, ganándose al respetable con una doma de los caballos sensacional, bailando con los caballos, arriesgando y toreando para matar de estocada casi fulminante y conseguir la recompensa deseada.

       Cerraba cartel Diego Ventura, que una vez más, llegó dispuesto a ser el triunfador de la tarde  y la verdad es que lo consiguió, por su propia categoría y por unos caballo que median la distancia al milímetro, parecía imposible dar la vuelta al ruedo de la condomina corriendo de lado y con el toro a milímetros del costado y sin rozarle ni un sólo instante, banderillas a dos manos, el teléfono, banderillas cortas, el público puesto en pie solicitó ambos trofeos que el palco otorgó. En el que cerraba feria se marchó a la mismísima puerta de toriles a esperar la salida y a raíz de ese momento un auténtico repertorio el que ofreció en nuestro más que centenario coso el rejón de muerte fue fulminante y ambas orejas terminaron muy merecidamente en su esportón.

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