"ALAGADO" GRAN NOVILLO DEL VENTORRILLO PREMIADO CON LA VUELTA AL RUEDO
Calasparra
4 de Septiembre
Casi tres cuartos de entrada
Novillo de El Ventorrillo, bien presentados
- Javier Jiménez.- Ovación con saludos y 2 orejas.
- ANTONIO PUERTA.- Palmas y silencio
- Juan Leal.- Ovación con saludos y palmas de despedida
Incidencias.- Se guardó un minuto de silencio en memoria del ganadero, apoderado y empresario José Luis Marca.
Javier Jiménez llegó a Calasparra con ganas de triunfar por segundo año consecutivo y rápidamente se puso a intentarlo con una bella con el capote en una serie de delantales bien realizada, puso al novillo en suerte dándole distancia y recibió un buen puyazo, una suerte de banderillas que obligó tanto a "Lipi" como a ángel Utrera a dsmonterarse. Ya con la franela en la mano todo se quedó en un buen intento ya que el novillo quería marcharse a tablas continuamente y protestaba al final de cada muletazo, de todos modos pudo Javier cortar alguna oreja de no ser por los tres pinchazos antes de una buena estocada.
En cuarto lugar le correspondió el novillo que estaba soñando, realizándole una gran faena por ambos pitones con unos derechazos lentos y con gusto y unas series de naturales que parecían carteles de toros, para culminar con unas manoletinas antes de pasear muy merecidamente las dos orejas del bravo novillo que con toda justicia fue premiado con la vuelta al ruedo.
Antonio Puerta comenzó de hinojos con dos largas cambiadas como "tarjeta de presentación" y un par de buenas verónicas, tras brindar al equipo médico, intentó todo ante un novillo complicado que nunca llegó a humillar y que salía distraído continuamente y con el que a la hora de la verdad el de Cehegín no acertó con el estoque, escuchó palmas tras los pitos al novillo en el arrastre. En su segundo, en el que Pascual Mellinas se desmonteró tras un buen par de banderillas, comenzó la faena con buen tono ofreciendo un par de series de bella ejecución, pero el novillo se rajó y ya fue imposible sacarle nada destacable, volviendo a estar desacertado con los aceros, siendo silenciada su labor.
Juan Leal se encontró con el peor lote de la tarde y poco pudo decir en La Caverina, sólo sus ganas de agradar y de estar en novillero, ya que con el tercero de la tarde comenzó enseñándole ya con el capote para conseguir sacarlo a los medios, con la franela lo intentó pero el bronco novillo no daba opciones despachándolo con un soberbio estoconazo tras pinchazo. Con el que cerraba plaza, un auténtico marmolillo, fue imposible sacarle un sólo pase, tardaba en entrar, y se quedaba a mitad del encuentro, lo intentó y se justificó pero el propio público le pidió que terminase una faena que fue imposible, escuchadndo palmas al retirarse al patio de cuadrillas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario