HOY SE REALIZA EL TRASLADO DE "EL GRAN PODER" A LA IGLESIA DE SAN NICOLÁS

EL CRISTO DE LOS TOREROS SERÁ ACOMPAÑADO EN EL TRASLADO POR ANTONIO PUERTA.

 EN LA PROCESIÓN PACO UREÑA PORTARÁ AL CRISTO JUNTO A SUS COMPAÑEROS.

SERÁ LA PRIMERA VEZ QUE ESTARÁ SIN SU CABO DE ANDAS ANTONIO GONZÁLEZ BARNÉS

     Para los que vivimos en Murcia capital, somos nazarenos y además aficionados a los toros, hoy es el "chupinazo" de salida de la Semana Santa y ese momento lo marca el reloj a las 8'00 en punto de la tarde, cuando El Gran Poder -El Cristo de los Toreros- sale del Convento de las Reverendas Madres Capuchinas a hombros de los toreros murcianos para dirigirse a la Iglesia de San Nicolás, donde procesionará el Viernes de Dolores en la Cofradía del Santísimo Cristo del Amparo y María Santísima de los Dolores, a partir de las 7'00 de la tarde.

   Matadores de toros, periodistas taurinos, empresario de la Plaza de Toros de Murcia, todos se unen como una piña bajo el manto protector del Cristo de los toreros. Sobre sus hombros lo han sacado Alfonso Romero (padre), Pepe Soler, Manuel Cascales, Antonio Mondejar, Rafaelillo, Alfonso Romero (hijo), Marcos de Rafael, Pepín Liria, Pepe Moreno, José María Requena, Ortega Cano, Manzanares (padre), son algunos de los toreros que lo han sacado por las calles de Murcia, junto a ellos el empresario Ángel Bernal,  el presidente del Club Taurino Alfonso Avilés, los periodistas Mariano Molina, Guillermo Lorente y un cabo de andas que este año estará junto al Cristo en el trono (aunque no lo podamos ver, estará seguro) nuestro añorado Antonio González Barnés (que este año me quedaré con las ganas de darle nuestro ritual abrazo para escucharle después eso de..."Paquico, sacame la foto que este año es el último")

   En el traslado de este año estará presente el matador de toros de Cehegín Antonio Puerta, llevando al Gran Poder sobre sus hombros por el Malecón camino a la Iglesia.

   El viernes, por su altura en estará en la cabecera, será portado en andas por el matador de toros Paco Ureña.

   Ambos toreros estamos convencidos de que sentirán la Protección del Cristo y se encomendarán a Él cada vez que se pongan el vestido de luces para jugarse la vida realizando el arte más bello y efímero que existe.