PABLO BELANDO A HOMBROS EN BLANCA

SURESTEÑO PIERDE LA PUERTA GRANDE POR CULPA DE.... ¡EL HOMBRO!

FERNÁNDEZ DE LA TORRE TERMINÓ EL DÍA EN EL HOSPITAL

Blanca

Día 15 Agosto

Prácticamente llenos los tendidos

Novillos de Madroñiz.- Bien presentados

- Suresteño.- Silencio y Ovación a la cuadrilla

- Pablo Belando.- Silencio y 2 orejas

- Fernández de la Torre.- Oreja

  Bien comenzaba la tarde para Suresteño, que reaparecía tras el grave percance sufrido el pasado 9 de Junio en Caravaca de la Cruz y tras la operación del hombro derecho a la que sometido, ya que le correspondió un novillo de esos que descubren al torero que tienen delante. Un buen novillo que exigía hacerle las cosas muy muy bien para evitar que pudiese contigo,  y el novillero lo vio desde el primer momento estando variado y con mucho gusto con el capote. Tras un buen par de banderillas de El Delicias, y tras brindar al respetable, se marchó derecho al centro del anillo, para comenzar la faena con unos buenos naturales que llegaron al tendido, durante la faena dejó llegar al novillo de lejos, le bajó la mano por ambos pitones, destacando algunas series por la derecha de mucha calidad, culminó con unos estatuarios y se fue a matar - como ya tenía ensayado - con la mano izquierda. Pinchó dos veces y al tercer intento el brazo se le salio de su sitio, teniendo que entrar a descabellar Belando. Estamos convencidos de que si mata a la primera, como mínimo pasea las dos orejas del novillo. El público siempre tiene la razón, pero de manera personal, pensamos que se mereció por lo menos obligar a la cuadrilla a dar la vuelta al ruedo.

Se le colocó el hombro en su sitio y salió de nuevo en su turno, mostrándose igualmente variado y con gusto con la capa y muy serio con la muleta, desmostando, una vez más, que está en un gran momento, que sabe ver a los novillos desde el primer momento, que no se "arruga" ante la adversidad y que le gusta torear con temple y mando, dando series por la derecha de gran calidad y atreviéndose a bajar la mano por el pitón izquierdo complicado del novillo. Al entrar matar se le salió nuevamente el brazo de su sitio teniendo que pasar a la enfermería. Mató Pablo de una buena estocada y aunque el público solitó la oreja el palco no la concedió.

   Pablo Belando llegó a Blanca dispuesto a triunfar y no dejarse ganar la batalla. Recibió al primero con una larga cambiada rodillas en tierra y una serie de buenas Verónicas culminadas con una media que pareció un cartel de toros. Con la muleta se mostró poderoso ante otro novillo que "pedia los papeles", templó con gusto de manera especial por el pitón derecho, mostrándose muy por encima de su oponente, tan a gusto estaba que - según mi punto de vista - pasó de faena al novillo, lo cual dificultó la hora de entrar a matar, donde perdió los trofeos que ya acariciaba. En el que cerró plaza se mostró con las mismas ganas e ilusión que en el anterior y sin dejar siquiera que lo parasen, se fue derecho a recibirlo con unas verónicas de mucha calidad. Con la muleta se mostró otra vez firme y dominante ante un buen novillo - el más grande del encierro - al que consiguió sacarle buenas series por ambos pitones, terminó matando de estocada entera y paseando las dos orejas del novillo.

   Un eral complicado el que le correspondió al alumno de la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia, Fernández de la Torre. De salida se paraba en los engaños y no consintió pasar ni una sóla vez y eso que Antonio Cama lo intentó bajando el capote y haciendo una buena labor, pero al llegar a la muleta, Juan Francisco se mostró firme con él y consiguió "sacar agua de donde pensábamos que no habría", le sacó partido por ambos pitones, pero se confió demasiado y en el momento que le perdió la cara el novillo lo mando a los aires de inmediato, dándose un fuerte golpe en la caída, siguió su faena y terminó paseando una merecida oreja.

Al terminar  y ver que el dolor en la espalda aumentaba cada vez más, pidió permiso al palco y se marchó al hotel a ducharse y cambiarse para marchar de inmediato al Hospital Comarcal de Caravaca, con la finalidad de descartar cualquier tema grave y poder realizar mañana el compromiso que tiene en Castillo de las Guardas. 

En el momento de escribir este texto, nos enteramos de que ha sido una contractura muscular que no le impide torear mañana en Castillo de las Guardas, razón por la cual, aunque dolorido el novillero se encuentra contento en estos instantes.

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