Día 15 Septiembre
Plaza de Toros de Murcia
Un tercio en los tendidos
Toros de Fuente Ymbro.- Excelentes de presentación, quinto muy bueno, siendo indultado y el resto sin fuerzas y peligrosos.
- Juan José Padilla.- Silencio y ovación
- Rafaelillo.- Saludos y 2 orejas y rabo simbólicos
- Iván Fandiño.- Oreja y ovación
Andaba mal la tarde, de entrada e incomprensiblemente sólo un tercio del aforo de los tendidos (de ello hablaremos en otro apartado) y los toros de Fuente Ymbro conseguían que su ganadero casi se diese golpes en la cabeza por el callejón de nuestro centenario coso al ver como les faltaba fuerza, transmisión, humillación..., pero llegó el quinto de la tarde, de nombre Operario, marcado con el nº 157 y con un peso de 507 kg. que tuvo la suerte de encontrarse a un "pedazo torero" llamado Rafael Rubio "Rafaelillo", que lo vio antes que nadie y ordenó que se le hicieran las cosas con tranquilidad y bien, para colmo, en un momento que quería marcharse de la pelea, el capote de Pepe Mora le indicó el camino de los medios andándole de espaldas y sin molestarle. A partir de ese instante vimos en la Condomina al Rafaelillo que templa, baja la mano y torea con gusto y gustándose. Tengo que confesar que para mí, si el toro fue bueno Rafaelillo consiguió estar por encima de él. El del barrio del Carmen realizó una faena totalmente variada poniendo en un principio la muleta a media altura para poco a poco bajar la mano y barrer el albero viendo como Operario humillaba y seguía sus engaños en una faena larga, que provocó un aviso desde el palco, pero donde conseguimos ver a un torero hacer la faena que soñábamos y poder demostrar que además de los Miuras y similares, Rafaelillo también sabe hacernos degustar el buen toreo, el toreo de calidad. Terminó como es normal paseando los máximos trofeos concedidos simbólicamente.
En el primero de su lote también se mostró por encima del de Fuente Ymbro, y pudo haber tocado pelo, pero no culminó con el estoque el trabajo realizado, "haciendo guardia" y escuchando una ovación que le obligó a salir a los medios a saludar.
Abría cartel Juan José Padilla, que se encontró con el peor lote de la tarde. El primero donde el de Jerez se lució en banderillas "asomándose al balcón" llegó sin fuerza y buscando muy peligrosamente por ambos pitones, con lo que tras comprobar por ambas manos que lo único que podía conseguir es salir por la enfermería montó el estoque. Silencio en su reaparición en Murcia.
En su segundo, donde se mostró muy bien con el capote y se lució nuevamente con las banderillas, se encontró con un toro que se paró a las primeras de cambio y por más que lo intentó fue imposible sacarle tres muletazos seguidos, siendo reconocido su empeño en agradar con una fuerte ovación del público.
Debutaba en Murcia Iván Fandiño, que en para su debut le tocó el toro "menos malo" de la primera parte del festejo, comenzó muy bien con el capote y realizó una faena con mucho gusto y clase, pero el toro no trasmitía lo suficiente para hacer que esta labor calase de verdad en los tendidos, paseando la primera oreja de la feria 2013.
En el sexto de la tarde, tras el paréntesis ganadero del quinto, la corrida siguió por el mismo camino y aunque el vasco lo intentó con ganas y gusto fue imposible sacar algo digno de mencionar, tan sólo el compromiso del torero de intentar sacar agua de un pozo seco e intentarlo con torería, siendo ovacionado al concluir el festejo.
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