CALASPARRA
30 Julio 2013
Casi lleno en los tendidos
4 toros de Dolores Aguirre (no sirvieron en líneas generales)
2 de Juan Manuel Criado (dieron buen juego)
- PACO UREÑA.- Silencio y Ovación con saludos
- ALBERTO LAMELAS.- Silencio y Ovación con saludos
- FILIBERTO.- Oreja y dos orejas
Llamó de verdad la atención el cartel de la corrida de toros mixta para celebrar la fiesta de los Santos Patronos de Calasparra, respondiendo muy bien la afición que prácticamente llenó los tendidos del coso de La Caverina, la lástima el juego de los de Dolores Aguirre.
Abría cartel el lorquino Paco Ureña, que llegó dispuesto a torear de verdad, pero se encontró en primer lugar con un toro que lo único destacable que realizó fue el tercio de varas, arrancándose desde el centro del aniño en su segundo encuentro con el caballo, convirtiéndose en peligroso ante la muleta de Ureña, que lo intentó una y otra vez por ambos pitones pero el animal no bajó la cabeza ni una sola vez. Siendo silenciada la faena por el público. En el segundo de su lote más de lo mismo: un torero por encima de su oponente pero sin opciones ha sacarle nada claro, ya que no se entregó tampoco en ningún momento el de Dolores Aguirre. Paco Ureña intentó incluso componer bien la figura, pero todo se quedó en muchas ganas e ilusión del torero que fue recompensado con una gran ovación a su esfuerzo y honradez teniendo que saludar desde el ruedo, escuchando algunos pitos el toro en el arrastre.
Si malos fueron los del lote de Paco Ureña, lo que le correspondió a Alberto Lamelas fue para haberlos mandado al matadero directamente desde el campo. El primero del lote de Lamelas salia "a su aire" de cada encuentro con la muleta, totalmente distraído y como si no fuese con él, Alberto se mostró profesional y lo intentó de todas las maneras posibles pero sin resultado positivo. Fue silenciado el torero y pitado el toro en el arrastre. Peor fue el quinto de la tarde, ante el cual Lamelas pecó de ganas de agradar, llegando en algunos momentos a estar pesado intentando sacar agua de un pozo totalmente vacío. Ovación por su esfuerzo que obligó el respetable a salir al tercio y fuerte pitada al toro.
Totalmente diferente el juego de los dos novillos de Juan Manuel Criado, que permitieron al novillero de Calasparra disfrutar delante de ellos.
Salió Filiberto, con el corazón lleno de ganas y de ilusión y la cabeza fría y dispuesta para pensar continuamente en como hacerle en cada momento lo mejor a cada novillo. "Armó el taco" con el capote en el primero de la tarde, toreando con mucho gusto y variedad, para posteriormente con la franela bajar las manos de manera increíble haciendo las cosas perfectas en cada embroque, dominando y gustándose a si mismo, dejando las zapatillas clavadas en el albero y ligando uno tras otro los muletazos, pero a pesar de "tirarse" de verdad a la hora de entrar a matar, el estoque no entró en todo lo alto y con el verduguillo no se mostró acertado, teniendo que conformarse con el premio de una oreja que pudo ser mucho más si no llega a ser por esto último. Con la cabeza puesta en ganarse a pulso la puerta grande, salio el calasparreño ante su segundo, que sin tener la calidad del anterior, permitía hacerle bien las cosas, y Filiberto realizó la faena que tenía, dando unos naturales que parecían carteles de toros, por la composición y por la lentitud. Se volcó nuevamente con el estoque y consiguió por méritos propios las dos orejas de su oponente y la salida por la puerta grande de "su" Plaza de Toros el día que se presentaba como novillero con caballos.
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