7 de Abril 2012
1/2 plaza
6 toros de Sánchez Arjona, justos de presentación y de juego desigual
- RAFAELILLO.- Oreja y oreja
- ALFONSO ROMERO.- 2 Orejas y ovación con saludos
- FRANCISCO MONTIEL.- Ovación con saludos y 2 orejas
Tal cual está la afición en las últimas temporadas en Cieza, podemos decir que la entrada de media plaza es más que aceptable y que el público respondió más que en otras ocasiones.
Tomaba la alternativa el torero de Cieza FRANCISCO MONTIEL y se encontró para empezar con un animal que presentaba peligro y salía suelto en el capote y que ya en la faena de muleta se quedó corto muy pronto y buscaba con la cabeza alta en todo momento, faena larga por intentar sacarle lo que no tenía y ante el que pudo haber cortado una oreja si no llega a fallar con el estoque, escuchando una cálida ovación que le obligó a salir a saludar a los medios. Brindó la muerte de este su primer toro como matador de toros a sus padres, como agradecimiento por el apoyo que le han demostrado en todo momento. El segundo de su lote, que brindó al público, fue el único toro que se pudo salvar del encierro y al que Montiel le dio buenos muletazos por pitón derecho y series largas y sentidas, cortando al final dos merecidas orejas que le abrían su primera puerta grande como nuevo matador de toros.
El padrino de la alternativa fue RAFAELILLO, un torero que no se deja ganar la partida ni por su propia sombra, en Cieza nos mostró sus dos caras del toreo, en el primero de su lote le sacó al toro lo poco que tenia de calidad, a base de temple, de torearlo con sumo gusto y relajado de gustarse a si mismo con la muleta y en cuarto de la tarde, un toro que presentó peligro por ambos pitones, nos ofreció la otra cara, la del torero que ante la adversidad se crece y si el toro no embiste pues embiste él y demuestra la razón por la cual está en ese lugar del escalafón y que puede estar aún más arriba. Cortó una oreja en cada uno de su lote y se ganó a pulso su salida por la puerta grande.
ALFONSO ROMERO demostró en Cieza que está sobrado de calidad y que es merecedor de estar en los carteles de cualquier feria importante de España. En el primero de su lote, que brindó a Antonio Cama en el día de su reaparición, se mostró firme y torero tanto con el capote como con la muleta, toreando relajado, con gusto y con una exquisita personalidad, llegó con rapidez al público su plasticidad y buenas maneras y tras matar de una gran estocada paseo las dos orejas del tercero de la tarde. El quinto fue con toro con peligro y donde además el viento molestó bastante durante la faena de muleta, de todos modos Romero lo intentó por ambos pitones y lo mató de otro estoconazo que por si sólo hubiese merecido una oreja.
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