TARDE DE LUJO EN EL CLUB TAURINO DE MURCIA

El primer “Martes Taurino” del año 2010 ha sido un auténtico lujo periodístico. Se trataba de la primera aparición en público de Antonio González Barnés y Antonio Puerta desde que se diese a conocer el apoderamiento del primero al segundo.

Tras la presentación de ambos por Alfonso Avilés, presidente del Club Taurino, González Barnés, tomó los “trastos” con prontitud y tras unos lances de recibo, donde de manera sencilla explicó su trayectoria dentro del mundo del toro, para a continuación tirar la pata p’adelante y bajar las manos con suavidad, indicando de manera pausada y templada (como los buenos toreros) las razones que le han llevado a apoderar a Puerta e indicando que ha conseguido ilusionarle de nuevo al ver torear a un joven el cual aprecia que está igualmente muy ilusionado en torear.
Siguió poniendo algún par de banderillas en todo lo alto, al indicar que Antonio Puerta seguirá durante este año bajo la disciplina de la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia, que es la encargada, en este periodo de su formación.
Con la misma torería y arte cogió la muleta, dando unos naturales sensacionales, cuando se refería a la manera de interpretar el toreo que tiene Puerta, describiéndolo de valor seco, que sabe dejar las zapatillas en el albero, bajar la mano con naturalidad y alargar las embestidas del novillo. No faltaron tampoco los adornos toreros, cuando mostró su total confianza en la Escuela de Tauromaquia y en su director artístico Alfonso Romero, o cuando se refería a lo bien que están respondiendo todos los amigos a los que les ha solicitado tentaderos. Siguió bajando la mano con maestría, cuando comentaba las gestiones que ya ha realizado con personas como los alcaldes de Cehegín y Moratalla, con Ángel Bernal, empresario de Murcia (y sobre todo amigo – indicó-) y el como le han atendido en todos sitios. Culminaba esta faena indicando lo bueno que es para la Fiesta la rivalidad que puede surgir en Cehegín con Antonio Puerta y David Fernández, dos maneras diferentes de concebir el arte de torear, pero al mismo tiempo complementarias para conseguir llevar a la afición a los tendidos.
La faena la remató con una soberbia estocada en todo lo alto, indicando que el puede ayudar mucho, pero que será Antonio Puerta el que al final esté en el lugar que él quiera estar, de nada sirven las gestiones si el torero no triunfa todas las tardes.
¡Suerte a los dos!

Fotos: Miguel Asís

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